jueves, 1 de septiembre de 2011

La dictadura de la pantalla

Hace unos meses hablaba Vargas Llosa en una entrevista del peligro que tenía una tecnificación excesiva de la sociedad y lo denominaba, con esa ironía venenosa que le caracteriza, la dictadura de la pantalla. La razón muy simple, la gran mayoría del denominado "mundo desarrollado" pasamos cerca de doce horas delante de una pantalla (hay gente que invierte mucho más), entendiendo por pantalla todas sus variantes actuales (pantalla de teléfono móvil, televisor, incluyendo aquí videojuegos, pantalla del ordenador, incluso la pantalla que te dice por donde tienes que ir cuando conduces...). Me acuerdo ahora de esto porque se siguen debatiendo las bondades del ordenador en las aulas, en países como E.E.U.U. o Alemania (aunque en USA han comenzado a retirarlos ya que varios estudios indican que no favorece la evolución del estudiante). La conclusión de todo esto es muy simple, no se pueden negar las infinitas posibilidades que el progreso tecnológico está aportando al ser humano pero no podemos incurrir en el error de pasar del uso al abuso, si no queremos que se den aberraciones como la de que un niño se forme en la escuela sin entrar en contacto con un maestro.